Catedral San Marcos
La Catedral San Marcos es una, sino la más bella de las edificios de Arica. La historia de su llegada a la ciudad se inicia tras el terremoto de 1868, cuando los ariqueños pidieron al presidente peruano, José Balta, que la iglesia que iba a ser emplazada originalmente a Ancón, al norte de Lima, fuera destinada a la Plaza Colón, en Arica.
Así, la Catedral -asimétrica y sencilla- fue elevada sobre los escombros de la antigua iglesia, apoyándose en la base de sus pilares. Su estructura neo-gótica está hecha completamente de láminas de metal, a excepción de las puertas de madera de la fachada. En su interior destaca un antiguo Cristo del siglo XII y el campanario original.